Malabo (Guinea Ecuatorial), 14 de enero de 2019 (AFP) – Un año después de la muerte en prisión de uno de sus activistas, el principal partido de oposición de Guinea Ecuatorial, Ciudadanos por la Innovación (CI), «lamentó» el lunes que no se haya puesto en marcha ninguna investigación a pesar de la promesa del presidente Teodoro Obiang Nguema de abrir una.
«A fecha de ayer», un año después de la muerte de Santiago Ebee Ela, ha indicado el lunes CI en un comunicado, no hay prueba alguna de que las autoridades hayan «clarificado este asesinato».
Según CI, que fue disuelto en febrero por el poder judicial de Guinea Ecuatorial, el Sr. Ebee Ela murió «como consecuencia de torturas» en enero de 2018 en la Comisaría Central de Policía de Malabo.
En una entrevista de mediados de enero, el presidente Obiang dijo que «creía» que el Sr. Ebee Ela era «un hombre enfermo», y que su muerte «no estaba relacionada» con los malos tratos. Prometió, sin embargo, que se abriría una investigación.
En el mismo comunicado del lunes, CI afirma que las fuerzas de seguridad «han asediado» el domingo la sede del partido, donde reside su líder Gabriel Nse Obiang, con el fin, según el partido, de «impedir» que asistiese a una misa en memoria del activista fallecido.
Según CI, Guinea Ecuatorial está «en estado de sitio».
En un comunicado publicado en las redes sociales el lunes por la tarde, el gobernante Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE) consideraba que las fuerzas de seguridad deben «ejercer su control y mantenimiento del orden público, como en cualquier país y lugar del mundo».
El PDGE considera también que CI, «este partido político ya desaparecido, ha sido abolido legalmente a causa de sus actividades dirigidas a promover el crimen, la violencia, la rebelión y el odio».
Además, el partido gobernante considera que el hecho de que el líder de la IC «difame a las fuerzas de seguridad para llamar la atención sobre sí mismo es un comportamiento RIDICULO y EXECRABLE, digno de ese desaparecido partido político».
A principios de febrero de 2018, la Unión Europea estaba preocupada por el «fuerte deterioro de la situación de los derechos humanos» en Guinea Ecuatorial, al igual que Amnistía Internacional.
En ese momento, varios activistas de CI afirmaron haber sido «torturados» en la comisaría central de policía de Malabo, una práctica confirmada por los defensores de los derechos humanos, pero firmemente negada por las autoridades de Malabo.
El régimen del Presidente Obiang, en el poder desde 1979, es acusado reiteradamente de violaciones de los derechos humanos por sus opositores y organizaciones internacionales.
