Informe económico de coyuntura del FMI. Agencia Lusa

El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé un crecimiento del 2,6% para el África subsahariana, casi el doble de la expansión económica del pasado año, pero alerta sobre la necesidad de reequilibrar los los presupuestos y contener la deuda pública.

“El crecimiento en Africa subsahariana debe llegar al 2,6% en 2017, casi el doble del crecimiento de 2016, pero está todavía muy por debajo de la tendencia del pasado y es poco más alta que el crecimiento de la población», se lee en el informe sobre Perspectivas Económicas Regionales para esta región que engloba a la mayoría de los países lusófonos.

El documento, difundido hoy en Washington, prevé una aceleración del crecimiento hasta el 3,4% en el próximo año pero alerta que “la incertidumbre política en Nigeria y en Suráfrica [las dos mayores economías africanas] impide una recuperación más fuerte y el crecimiento no debe aumentar en 2019″.

Aún en la “resaca” de la crisis de los precios bajos del petróleo y del debilitamiento económico mundial, las economías africanas de crecimiento más rápido «continúan siendo impulsadas por el gasto público, con los niveles de deuda y los costes del servicio de la deuda incrementándose”.

La deuda pública ha superado el 50% del PIB en 22 países a finales del año pasado, dice el FMI, haciendo notar que «los costes del servicio de la deuda se están convirtiendo en una peso importante, en especial para los países productores de petróleo como Angola, Gabon y Nigeria en lo que van a superar el 60% de los ingresos de los respectivos Gobiernos en 2017».

La consecuencia es que «la creciente exposición a los [deudas o empréstitos] soberanos y la acumulación de atrasos en los pagos domésticos han incrementado las presiones sobre el sector financiero, como se ha puesto en evidencia por la subida de los créditos impagados» en estos tres países, ponen de manifiesto los economistas del FMI.

Al mismo tiempo, continúan, «las condiciones de financiación externa han venido mejorando considerablemente  desde 2016, con varias economías de frontera, como Costa de Marfil, Nigeria y Senegal, regresando a los mercados en la primera mitad de este año y otra, Angola, que plantea hacerlo en breve».

Las emisiones de deuda, además, han llegado a los 4,600 millones de dólares entre enero y junio, lo que comparado con los solo 570 millones de dólares para todo el año pasado, ponen en evidencia las incrementadas necesidades de financiación de las economías de esta región.

«La diferencia ente los tipos de interés de los mercados de frontera africanos y los mercados emergentes han disminuido», escriben los técnicos del FMI.

Para los países exportadores de petróleo, como es el caso de los lusófonos Angola y Guinea Ecuatorial, «los esfuerzos de consolidación presupuestaria van a llegar, de media, a los 5,3 puntos porcentuales del PIB en los próximos cinco años y en algunos casos, como Angola, un ajuste derecto ya se ha llevado a cabo» en los últimos dos años.

Sin embargo, concluyen los expertos del FMI, «la mayor parte del ajuste se ha conseguido hasta ahora a través de cortes en los gastos de capital, reflejando una combinación de costreñimientos financieros  y opciones políticas deliberadas».

https://www.dn.pt/lusa/interior/africa-subsariana-cresce-26-este-ano-mas-aumento-da-divida-e-preocupante—fmi-8882049.html